Los Consejeros Comunitarios ayudan a las personas que no tienen seguro, cuya cobertura actual no brinda beneficios de servicios de salud mental, tienen bajos ingresos y no tienen dinero para pagar los servicios de cosejería, o que no recibirían tratamiento de otra manera.
Los servicios de cosejería son proporcionados por consejeros profesionales autorizados y capacitados, trabajadores sociales clínicos autorizados y consejeros matrimoniales y familiares autorizados. Las sesiones son privadas y se llevan a cabo en un ambiente seguro y familiar, como iglesias y centros comunitarios.
La primera reunión con un consejero es gratuita. Se cobra una tarifa modesta basada en una escala flexible de costo por cada sesión de seguimiento; sin embargo, a nadie se le niega el servicio porque no puede pagar.